Un servicio residencial a la medida de quienes lo necesitan
Los Centros Residenciales de Inclusión han ido evolucionando a lo largo de los años, tratando de adaptarse a las necesidades de unos residentes cada vez más diversos.
Preservar la intimidad de cada persona y que cada uno de los residentes se sienta respetado en sus costumbres y creencias son hechos prioritarios. Por este motivo, los centros disponen de habitaciones individuales, taquillas personales y ofrecen un conjunto de servicios adaptados a las necesidades de los residentes: actividades dentro y fuera del centro programadas según los intereses de los residentes en cada momento, menús de comedor variados para atender a todas las necesidades (vegetarianos, veganos, musulmanes, sin gluten…), horarios de entrada y salida del centro adaptados a la situación de cada persona, etc.
Además, se ofrece asesoramiento laboral y psicológico y se deriva a las personas a otras entidades con las que se trabaja en red, para que puedan resolver otras dificultades específicas.